La autoestima es la valoración que hacemos de nosotros mismos. Empieza a formarse en torno a los 5 años, influyendo en un principio la percepción que tienen del niño las figuras relevantes de su vida. Enseñar a los niños a reconocer sus logros, a aceptarse como son, a esforzarse en mejorar sin compararse con los demás, y plantearse objetivos alcanzables puede ayudar a mejorar la percepción y la valoración que tienen de ellos mismos, y por tanto, tener una alta autoestima. Lo que pensamos sobre nosotros mismos influye en cómo nos sentimos, por lo que tener una buena autoestima protege de la aparición de problemas emocionales como la depresión o la ansiedad. En este libro del que es co-autor Jose Pedro Espada se dan todas las claves.